martes, 5 de octubre de 2010

Palacios

¿Quién no recuerda al ciclón Flora -ensañado contra Cuba desde el 4 hasta el día 8 de octubre de 1963- considerado como una de las mayores catástrofes del Siglo XX en el país? Luis Carlos Palacios Leyva contaba entonces con 12 años, y salió de Bayamo hacia Saladillo, a poco más de 50 kilómetros de Bayamo, en Cauto del Paso, municipio de Río Cauto, a avisarle a la esposa de su tío que tenía turno de parto en el Hospital General Milanés, único de Bayamo en esa época... !y hasta se dieron cruce en el camino!
Este fotógrafo del periódico provincial La Demajagua le ha contado a Calle Siete que se quedó unos días para acompañar a Arturo, su tío, y allí lo sorprendió el "Flora," tuvieron que trepar al techo de una casa y permanecer durante siete días junto a un vecino. quien se unió a ellos porque su familia se fue buscando refugio en otro lugar.
En medio de un paisaje desolador, de desesperación; mientras las corrientes de agua arrastraban cadáveres de seres humanos y animales, techos con personas gritando despavoridas, árboles, camas, fogones y de cuanta cosa pueda imaginar la mente, ellos con un estrago aterrador y sin esperanzas de suministro alguno pescaron, al cuarto día, después de mucho esfuerzo, una calabaza. "¡Tuvieron que comérsela cruda, y eso que Arturo no la podía ver ni en pintura!
"Ahí está Jesusito, -el hijo de Argimiro, otro de mis tíos- ahora es ingeniero mecánico, a ese primo mío le cortaron el cordón umbilical con un machete, que fue lo primero que encontraron luego de bucear a ciegas y a riesgo por la cocina de la casa."
Palacios cuenta que la familia de aquel vecino de Arturo se ahogó río abajo, como sucedió con alrededor de las mil 200 personas que murieron entonces por la furia del Flora.
Hay que recordar que tal acontecimiento dio lugar al programa de Voluntad hidráulica creado por Fidel.