¡Ay, amor!

Hoy es un día en el que siempre traigo a mi memoria a mi amiga Juany, a quien conocí en la Universidad de Oriente, en Santiago de Cuba, porque está de cumpleaños; también recuerdo a María Teresa Puente, o mejor dicho Teté, una de las personas más respetadas no solo en Bayamo, sino en la suroriental provincia de Granma, por sus conocimientos en el ámbito de la cultura.

Teté no estaría cumpliendo años hoy,  pero fue lo que me hizo creer durante mucho tiempo, hasta que una buena tarde me confesó que es el 15, pero le gustaba decir 14, por todo el romanticismo y la magia que envuelve el Día de San Valentín, primero me causó risa y después hasta justifiqué sus miedos.  Al fin y al cabo la quería mucho, la admiraba y la respeté siempre, además, somos humanos y con muchas imperfecciones.

Empero, hoy podría escribir sin razón aparente, porque siempre estoy enamorada y hasta pierdo la cabeza ¿cuántos años tienes? No importa, el amor está en la cabeza, no en la edad. Hay algo mejor en el mundo que amar, ser amado y tomar la mano del otro con confianza?

No hay que referirse a los malos amores, esos te golpean una y otra vez, te duele; pero no dices nada, no puedes expresarlo y aunque lo hicieras, nadie puede comprenderte, solo quienes lo han experimentado antes.

Eso sí, tengo la certeza, igual que Calle Siete, de que el amor es lo más grande que le puede ocurrir a una persona.