Me pregunto cuántas personas en el mundo, ahora mismo, mientras lees estas líneas están usando condón. Quizá muchísimas más que las que piensas, probablemente, un gran número.
Cuentan que unos mil años antes de Cristo, en el Antiguo Egipto, usaban trozos de tela impregnados en estiércol de cocodrilo como preservativo para evitar el embarazo. Y, aunque ha llovido demasiado desde entonces, dicen las malas lenguas que el 40 por ciento de este lo compran las mujeres.
Para mí tiene mucho sentido porque las féminas son, me incluyo aquí, bien precavidas, y porque evita el contagio de enfermedades de transmisión sexual e infecciones adquiridas por contacto sexual sin protección, como herpes, clamidia, gonorrea, VIH y verrugas, además del embarazo no deseado.
A Daniel, le pregunto de forma recurrente si desea que le compre Vigor, el nombre con el que se comercializa en la farmacia cercana a dos cuadras de la casa y siempre responde que ya tiene; de todos modos, como quien no quiere las cosas, de vez en cuando, le dejo una cajita con el aditivo en la mesita de noche.
Sin embargo,conocí por Ibrahín Sánchez Carrillo que desde hace más de un mes no hay condones en el municipio de Bayamo. Faltarán también en el resto de los territorios de Granma? Qué estrategia tendrá la provincia cuando está amenazada la salud de los granmenses si Cuba profesa lo mejor del juramento hipocrático de fomentar la Medicina que precave?
Calle Siete quiere saber; y asimismo recomienda, que más allá de la confianza que exista en la pareja, los especialistas del tema dan fe de la conveniencia de usarlo. Si lo utilizas, probablemente te permitirá disfrutar del sexo de forma segura.