sábado, 17 de junio de 2017

Gas licuado liberado en Bayamo



Sé que es el momento de decirlo. Ya habían caído las primeras gotas de lluvia de  hoy sobre la ciudad, cuando  compré mi primer cilindro de 10 kilogramos de gas licuado liberado, en la Plaza Luis Ramírez López,  de Bayamo, municipio capital de la suroriental provincia de Granma. 
No era el punto habitual donde compraba mi cuota normada; pero sí es uno nuevo creado por la Unión Cuba-Petróleo y que mis vecinos agradecen inmensamente  porque lo ha acercado  no solo al barrio, sino a Calle Siete. Me consta y sé que la mencionada opción adicional, comenzada en este territorio el pasado día 5, a precio no subsidiado -110 pesos moneda nacional- es otra fuente de cocción de alimentos que contribuye al ahorro del consumo de energía eléctrica en el hogar. 
Diosvanis Santillán Aguilar, director general de la Empresa Comercializadora de Combustibles, en la provincia,  aseguró en el periódico La Demajagua, que la medida responde a la implementación del Lineamiento 247 de la política económica y social, aprobado en el VII Congreso del Partido: Avanzar en la venta liberada de gas licuado de petróleo y de otras tecnologías en Cuba. 
Bayamo inició la modalidad en la comercialización del producto con seis puntos de venta e igual número  de oficinas de contratación. 
De todos modos estoy más tranquila, empero todavía me duele cuando miro muchos años atrás y siento el desosiego de mi madre mientras sus manos inquietas y hábiles apuraban los movimientos con los que daba mantenimiento al fogón Pike con el que cocinaba.