viernes, 29 de septiembre de 2017

Amor de barrio

Antes de que Irma rasgara la piel de los cubanos, había imaginado la actividad de mi bayamesa cuadra, -ahora multiplicada en pro de perfeccionar su funcionamiento- para conmemorar el aniversario 57 de la creación, por el Comandante en Jefe Fidel Castro, de los Comités de Defensa de la Revolución. el 28 se septiembre de 1960.
Me había hecho a la idea de preparar un pudín de pan o un flan de leche para la mesa, la caldosa y hasta pensaba cómo iba a distribuir mi tiempo para poder participar en la actividad de la más numerosa organización en Cuba, que agrupa a alrededor de ocho millones de personas mayores de 14 años.
Irma se alejó de Cuba y no pudo con el trabajo de los CDR.
El municipio de Bayamo, capital de la suroriental provincia de Granma, este año, mereció  la condición de Vanguardia nacional, por el aporte a la Patria, la cotización y las donaciones de sangre, y su coordinadora, Raysa Mabel Proenza recibió la Distinción 28 de Septiembre.
Realmente lo extrañé, pero no estoy triste porque sé que en estos momentos, en que la mamá de Esperancita, Josefa, una de las fundadoras de los CDR, en la comunidad se encuentra hospitalizada en el Carlos Manuel de Céspedes resultan más importantes la solidaridad, además de la confianza en que los médicos ponen toda su energía y su profesionalidad  para que se recupere.
No hay humo, pero Calle Siete de todos modos sigue respirando el aroma  y el amor por la familia grande que habita en cada barrio.




Todos los brazos en la recuperación

La  Unión de Periodistas de Cuba (Upec), en Granma, materializa el llamamiento del General de Ejército Raúl Castro Ruz, en que nos insta a enfrentar las labores de recuperación de las huellas devastadoras del huracán Irma, con el ejemplo imperecedero del Comandante en Jefe Fidel, nuestro Líder histórico.
La convocatoria,además de las acciones cotidianas para apoyar a otros territorios, este jueves tuvo su cita en uno de los cinco polos productivos de la provincia: Cautillo-Bejuquero, en el municipio de Bayamo, donde labora el contingente Carlos Manuel de Céspedes.
Allí, por supuesto, no podían faltar los profesionales de la CNCTv, la emisora Radio Bayamo y La Demajagua, conscientes de la multiplicada responsabilidad en esta hora de esfuerzos, en la que todos los brazos solidarios resultan poco.
Calle Siete también  acudió a la limpia de plátanos.
















 

Nunca es tarde

Muchos seguidores han solicitado a Calle Siete, la publicación del mensaje íntegro del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba, sobre la etapa recuperativa en el país tras el paso del huracán Irma, aquí se los dejo.

Llamamiento a nuestro combativo pueblo
El huracán Irma, con su fuerza destructora, arremetió contra nuestra Isla por más de 72 horas, desde la mañana del 8 de septiembre hasta la tarde de este domingo. Con vientos que sobrepasaron en ocasiones los 250 kilómetros por hora, recorrió el norte del país desde Baracoa, castigada también por otro fenómeno de este tipo hace casi un año, hasta las inmediaciones de Cárdenas.
Sin embargo, por la inmensidad de su tamaño prácticamente ningún territorio se libró de sus efectos.
Calificado por los expertos como el mayor huracán formado en el Atlántico, este fenómeno meteorológico causó severos daños al país, los cuales, justamente por su envergadura, aún no se han podido cuantificar. Una mirada preliminar evidencia afectaciones en la vivienda, el sistema electroenergético y la agricultura.
Además golpeó algunos de nuestros principales destinos turísticos, sin embargo las afectaciones serán recupe­radas antes del inicio de la temporada alta. Contamos para ello con los recursos humanos y materiales requeridos, por constituir una de las principales fuentes de ingreso de la economía nacional.
Han sido días duros para nuestro pueblo, que en solo pocas horas ha visto como lo construido con esfuerzo es golpeado por un devastador huracán. Las imágenes de las últimas horas son elocuentes, como también lo es el espíritu de resistencia y victoria de nuestro pueblo que renace con cada adversidad.
En estas difíciles circunstancias ha primado la unidad de los cubanos, la solidaridad entre los vecinos, la disciplina ante las orientaciones emitidas por el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil y los Consejos de Defensa a todos los niveles, la profesionalidad de los especialistas del Instituto de Meteorología, la inmediatez de nuestros medios de comunicación y sus periodistas, el apoyo de las organizaciones de masas, así como la cohesión de los órganos de dirección del Consejo de Defensa Nacional. Mención especial para todas nuestras mujeres, incluyendo las dirigentes del Partido y el Gobierno, que con aplomo y madurez dirigieron y enfrentaron la dura situación.
Las jornadas que se avecinan serán de mucho trabajo, donde volverá a quedar demostrada la fortaleza de los cubanos y la confianza indestructible en su Revolución. No es tiempo para lamentarnos, sino para volver a construir lo que los vientos del huracán Irma intentaron desaparecer.
Con organización, disciplina y la integración de todas nuestras estructuras, saldremos adelante como lo hemos hecho en ocasiones anteriores. Nadie se llame a engaño, la tarea que tenemos por delante es inmensa, pero con un pueblo como el nuestro ganaremos la batalla más importante: la recuperación.
En este momento crucial, la Central de Trabajadores de Cuba y la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, junto a las demás organizaciones de masas, deberán redoblar sus esfuerzos para borrar lo más pronto posible las secuelas de este destructivo evento.
Un principio se mantiene inamovible: la Revolución no dejará a nadie desamparado y desde ya se toman medidas para que ninguna familia cubana quede abandonada a su suerte.
Como ha sido costumbre cada vez que un fenómeno meteorológico nos golpea, son muchas las muestras de solidaridad recibidas desde todas partes del mundo. Jefes de Estado y de Gobierno, organizaciones políticas y amigos de los movimientos de solidaridad han expresado la voluntad de ayudarnos, lo que agradecemos en nombre de los más de once millones de cubanas y cubanos.
Enfrentemos la recuperación con el ejemplo del Comandante en Jefe de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, quien con su permanente fe en la victoria y férrea voluntad nos enseñó que no existen imposibles. En estas difíciles horas, su legado nos hace fuerte y nos une.
Raúl Castro Ruz
La Habana, 10 de septiembre de 2017

viernes, 22 de septiembre de 2017

Periodismo e internet



Puede decirse que en el salón de conferencias del periódico La Demajagua, en su sede de Bayamo, en Granma, aunque se les echó de menos a Silverio Rafael Martínez, Ibrahín Sánchez y a Gislania Tamayo, ausentes por razones bien justificadas a la Asamblea X Congreso de la Unión de periodistas de Cuba (Upec).
Sobre las 2:00 de la tarde llegaron a la redacción Juan Carlos Ramírez Heras y Daniel García Zayas, de la presidencia nacional y provincial, respectivamente. Después hubo un minuto de silencio para recordar a Antonio Moltó Martorell, quien estuvo al frente de la Upec en la Mayor de las Antillas y desaparecido físicamente.
Los temas centraron  su interés en el nuevo  el escenario mediático y sus retos, modelos de gestión de la prensa y la profesionalidad, el uso eficiente de las nuevas tecnologías, la importancia de incrementar la interacción con los diferentes públicos, y el funcionamiento de la organización de los periodistas en el territorio.
El periodismo hoy es un desafío; pero la adaptación del periodismo a Internet, con el surgimiento de nuevos medios digitales, se dijo universalizan nuestros mensajes, por esa misma razón tenemos el deber de poner la tecnología al servicio de la cultura, la educación, el desarrollo económico, la solidaridad y la cohesión de Cuba y los cubanos.
Para Calle Siete aplaude la resulta significativo el talento, la preparación y la voluntad de los profesionales de La Demajagua para asumir los nuevos retos con la polivalencia en el periodismo y dejar escuchar  los latidos del corazón de los hechos que narramos.





jueves, 14 de septiembre de 2017

Bayamo transpira solidaridad



Las imágenes de la Televisión Cubana de las huellas del huracán Irma por Cuba todavía conmueven. ¡Qué tristeza!
Empero la sonrisa que llega de las inagotables anécdotas nos contagia a todos y también porque no cesa la solidaridad, la preocupación, la colaboración de las autoridades políticas y gubernamentales. ¡Cuán saludable es ese sentimiento que da deseos de ayudar a los demás sin intención de recibir algo a cambio!
En la Mayor de las Antillas la solidaridad es uno de los valores esenciales para los cubanos, y más en situaciones de desastres naturales, resulta para nosotros más que un compromiso moral apoyar a un vecino o a familiares, o a coterráneos en situaciones difíciles, no solo brindándole techo y comida, sino hasta un poquito de sal si no se dio cuenta que no le alcanzaba para terminar  a comida y ya están cerradas las bodegas.
Lo que más me gusta en estos casos es la humildad, propia de seres humanos extraordinarios, la energía y la grandeza de de los afectados y de quienes se entregan en cuerpo y alma. Ahí están, igualmente, los brazos y las manos de las diferentes generaciones, que no flaquean, se fortalecen.
Desde Bayamo, capital de la provincia de Granma partieron a Camagüey para labores de recuperación centenares de constructores, operadores, y de sectores como Servicios Comunales, Telecomunicaciones, RadioCuba y de Azcuba, con equipos de volteo, cargadores, vehículos multipropósito, alzadoras y motosierras. Además de otros que entregarán su energía en otros territorios afectados.
A Cuba la solidaridad le corre por las venas, por eso a Calle Siete le es innata, congénita… Así lo creo.