jueves, 21 de octubre de 2010

¡Seis dedos!


A primera vista, Leonardo Fleitas Rodríguez denota un joven de una simpatía y una vitalidad apabullantes. Este bayamés de 22 años, que trabaja como sanitario en el campamento escolar de San Rafael, municipio de Buey Arriba, provincia de Granma, no ha podido librarse de las miradas curiosas de cuantos lo conocen.
Genéticamente hablando y sin adentrarnos en los mecanismos por los cuales se conserva y trasmite la semejanza entre los padres y los hijos, así como el origen y la significación, las variaciones y mecanismos por los cuales dichas semejanzas se modifican y transforman, Leonardo nació diferente, quizás por caprichos de la naturaleza , o vaya usted a saber qué otras pretensiones de la evolución.
Dejando a un lado los sinuosos caminos de los genes y los cromosomas; él, que carga con 24 dedos, seis en cada mano y en cada pie, cuenta que su mamá tuv o siempre la voluntad de someterlo a una operación; sin embargo los contratiempos de la vida le jugaron una mala pasada y lo obligaron a posponerla de manera recurrente.
Calle Siete recordó entonces a Papi (Víctor Enrique) y a Maíta (Hortensia), dos de mis hermanos mayores, quienes nacieron con el síndrome de la polidactilia o con seis dedos en las manos -otro después del meñique y sin huesos-, y quedaron marcados para siempre.
No tengo referencias de un caso similar en Cuba; pero sé que no está triste, no está solo ni siente nostalgias. Y, pensándolo bien, a  veces me parece que a Leonardo le deben doler los pies.



martes, 19 de octubre de 2010

Fabré

Bastó una breve visita a su casa, en el municipio de Manzanillo,  para entender definitivamente el espíritu, el ritmo y la música de uno de los compositores latinos con una obra extensa, inagotable y sedimentada a las mejores raíces de la cultura nacional.
En esa tarde, Calle Siete vio en el brillo de los ojos de Cándido Fabré el pensamiento de Sixta, su mamá, la ternura del amado municipio de San Luis,  en Santiago, y el alma toda de Cuba coqueteando con la inspiración, la urgencia, lo inmediato, lo imperfecto... características con las cuales recrea y entrega, a través de melodías y canciones, la sensibilidad de la gente sencilla del pueblo.
Dueño de una voz personalísima Fabré parte para sus temas de lo circunstancial que habita en el cubano, vivencias y personajes comunes o novelescos para humanizar el arte por encima de lo académico, que para eso cuenta con la maestría de la calle y el destino labrado con las uñas.
Hoy debe haber encontrado sus mejores notas, porque Fabré y sus músicos festejan el aniversario 17 de la creación de la Banda. No es para menos, y por si no lo sabían, no hay en la Tierra una sola mujer o un hombre que asista a sus conciertos que deje de mover algún músculo.¡Felicidades!
¡Ah! Él no sabe que yo lo quiero desde  que saludó a mi madre, un día cualquiera, en una  bayamesa calle, como suelen hacerlo los mejores hijos. Mi madre y yo se lo agradecemos inmensamente.

El ingenioso sonero Cándido Fabré Fabré


por Luis Carlos Frómeta Agüero
Cuentan que en aquel pintoresco paraje de cuyo nombre siempre quiere acordarse, la vieja Sixta hizo de todo para satisfacer la exigencia diaria de la familia: trabajó la tierra, cortó caña, lavó, planchó... pero nunca imaginó que aquel hijo, nacido el 20 de septiembre de 1959, en la mfinca sanluisera de La Guadalupe, se convirtiera en el prolífico improvisador de voz inconfundible y talla universal. 
Este hombre, que de niño luchó contra los molinos de viento y cantó en las esquinas de su pueblito natal, debió llamarse Cándido Veranes Isac, pero el destino le impuso los apellidos de su madre: Fabré Fabré.
Como caballero andante gusta de tropezar para saber que puede levvnatrse con mayor fuerza. Tal vez por eso los años le dulcifican el alma de poeta martiano, de trovador, de cubano comprometido con su tiempo.
Recuerdo aquella noche de agosto de 1983 cuando Dulcinea le abrió el escenario de la Plaza de la cultura de Manzanillo junto a los "Originales de Pachi". Desde entonces trabaja intensamente para, sin pretenderlo, alistarse entre los más versátiles e ingeniosos soneros del mundo.
Considerado como uno de los compositores latinos de fuente inagotable, llamado también el "rey del repentismo" en la música popular cubana, este quijotesco personaje llamado Cándido Fabré Fabré, el hijo de Sixta, el mismo que prefiere el son para la banda, tiene en su canto el filo del machete de Maceo, el fusil de Fidel y en la mente su trinchera de ideas.
Hoy se agiganta en el escenario, levanta la réplica del bastón del Beni, como el primer artista cubano en recibirlo, porque su canto es bandera, cubanía, es paz.



lunes, 18 de octubre de 2010

Chela

Chela nació con el nombre de Elia Rosa González Tornés, el 2 de agosto de 1931, en Bayamo. Ella toda parece expresar una fascinante mezcla de sentimientos contradictorios: una proximidad inexplicable entre la tristeza callada, el dolor, por no haber parido,  y al mismo tiempo una sana y agradable sonrisa.
La veo leyendo un ejemplar del periódico de la provincia de Granma, La Demajagua,  y no puedo abstraerme de su pasado de sombras, cual flor de la noche; mientras refleja en su rostro el enigma del tiempo capaz de descubrir lo que puede existir más allá de lo que la vista alcanza.
Es curioso, el peso de su mirada es inequívoco y su sensibilidad, quizás  por los recodos  del camino, a ratos se vuelve sinestesia. Y, puesto que la lengua es solo imagen, en esa trasposición o convergencia de los sentidos trueca la lógica de la causa y el efecto, el evento y sus consecuencias; no hay analogía ni genealogía, no hay historias ni parangones, no hay saberes ni contradicciones; pero no olvida.
Aun así su memoria sirve de resguardo al modo de cómo aprendió a leer y a escribir, en l961, cuando a través de la Campaña de Alfabetización en Cuba, a instancias de Fidel, mucha gente tuvo la oportunidad de saber que existía el abecedario y también encontró la magia  del conocimiento. Calle Siete la respeta.
A personas como Chela, alfabetizada desde entonces, y a los alfabetizadores, el municipio de Bayamo les dedica la decimosexta edición de la Fiesta de la Cubanía que comenzó ayer y culmina el  20, Día de la cultura cubana.



domingo, 10 de octubre de 2010

Un grito de libertad

"... la independencia se ha de buscar con el alma entera de hombre".
José Martí

Por Iliana Martín Pérez
Tal es la figura de Carlos Manuel de Céspedes, hombre que marcó pauta en la historia de la nación . Patriota bayamés, dueño de un ingenio ubicado en la jurisdicción de Manzanillo llamado Demajagua por la abundancia en la finca del majestuoso árbol de la majagua.
Para la definitiva libertad era puntual levantarse en armas y solo precisaba determinar el momento oportuno. Diversos criterios existían, unos que ya había llegado el momento, otros que debían esperar condiciones económicas favorables, pero factores objetivos hacían comprender la trascendencia de una revolución tales como: la imperiosa necesidad histórica de abolir la esclavitud, el desarrollo del sentimiento nacional, además de la madurez patriótica alcanzada, todos en su conjunto señalaban que era hora de iniciar la lucha por liberar la Patria.
El conocimiento de un mensaje enviado por el Capitán General de la Isla a las autoridades y que ponían en peligro la vida de los conspiradores, ordenando la detención de Carlos Manuel de Céspedes, Francisco Vicente Aguilera, Pedro Figueredo (Perucho), entre otros patriotas, y la delación que sufrió la conspiración hicieron adelantar la fecha del acontecimiento, por lo que Céspedes da el grito de independencia en su ingenio Demajagua, despojándose de todo su patrimonio para ofrendarse por completo a la Patria., siendo así el líder de la revolución que iniciaba con su primera determinación, la libertad a sus esclavos y dando a conocer el documento que ha pasado a la historia como Manifiesto del Diez de Octubre.
Esta acción invitaba a todos los oprimidos a levantarse e incorporarse a la guerra definitiva por la definitiva independencia, de esa forma se escribiría una hermosa página de la historia de Cuba.
Con el repicar de las campanas allí, tomaba la zona del Golfo de Guacanayabo una importancia significativa al llamar a todos los hombre, negros, blancos, mulatos, libres e iguales como ciudadanos, a unirse para la lucha por la soberanía, declarando la guerra contra el colonialismo y jurando vencer o morir antes que ver a la Patria pisoteda.
Denominado por muchos estudiosos de la historia de Cuba como un hecho luminoso, refulgente, que refiere identidad, cubanía, libertad e igualdad conmemoramos el 10 de octubre. Glorioso acontecimiento que reclamó el respeto a la vida, a la creación de la nacionalidad, en el que Céspedes mostraba su añoranza de que el pueblo se sintiera parte de la vida política y pública democráticamente.
Hoy, fundiendo la historia con el momento en que vivimos vuelven a sentirse las campanas para las actuales generaciones que continuarán la marcha con las ideas de Patria o Muerte, símbolo de intransigencia revolucionaria como ocurrió el 10 de octubre de 1868.

miércoles, 6 de octubre de 2010

6 de octubre

Hace buen tiempo en Bayamo y el sonido del avión que distribuye la prensa, hoy piloteado por Juan Carlos Fournier Rodríguez, de la Empresa Nacional de Servicios Aeroportuarios (ENSA) me lleva a recordar el aniversario 34 del abominable crimen de Barbados.
Yo, que amanecí con una idea fija en la cabeza por el trágico hecho del 6 de octubre de 1976, no dejo de preguntarme cómo sería Cuba y cómo vivirían las familias de las 73 personas asesinadas ese día, si Luis Faustino Posada Carriles y Orlando Bosch no fueran terroristas y sí mejores seres humanos.
Creo que habría que hurgar mucho en la historia para hallar un suceso que haya estremecido tanto a mi país por el llanto y el dolor.
Hay mucho en común entre aquellos pasajeros de múltiples profesiones, tripulantes de la nave CU-455 de Cubana de Aviación, 11 estudiantes guyaneses, cinco funcionarios norcoreanos y jóvenes esgrimistas que regresaban victoriosos. Nunca llegaron a la Patria.
Calle Siete sabe quiénes perdonan a Posada Carriles y a su cohorte de demonios: la mafia de Miami, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y el Gobierno de Estados Unidos; pero confía en que algún día alguien repare sus injusticias.
El Consejo de Estado aprobó ayer el Decreto-Ley No. 279 por el cual se decide declarar el día 6 de octubre de cada año como Día de las víctimas del terrorismo de Estado.

martes, 5 de octubre de 2010

Palacios

¿Quién no recuerda al ciclón Flora -ensañado contra Cuba desde el 4 hasta el día 8 de octubre de 1963- considerado como una de las mayores catástrofes del Siglo XX en el país? Luis Carlos Palacios Leyva contaba entonces con 12 años, y salió de Bayamo hacia Saladillo, a poco más de 50 kilómetros de Bayamo, en Cauto del Paso, municipio de Río Cauto, a avisarle a la esposa de su tío que tenía turno de parto en el Hospital General Milanés, único de Bayamo en esa época... !y hasta se dieron cruce en el camino!
Este fotógrafo del periódico provincial La Demajagua le ha contado a Calle Siete que se quedó unos días para acompañar a Arturo, su tío, y allí lo sorprendió el "Flora," tuvieron que trepar al techo de una casa y permanecer durante siete días junto a un vecino. quien se unió a ellos porque su familia se fue buscando refugio en otro lugar.
En medio de un paisaje desolador, de desesperación; mientras las corrientes de agua arrastraban cadáveres de seres humanos y animales, techos con personas gritando despavoridas, árboles, camas, fogones y de cuanta cosa pueda imaginar la mente, ellos con un estrago aterrador y sin esperanzas de suministro alguno pescaron, al cuarto día, después de mucho esfuerzo, una calabaza. "¡Tuvieron que comérsela cruda, y eso que Arturo no la podía ver ni en pintura!
"Ahí está Jesusito, -el hijo de Argimiro, otro de mis tíos- ahora es ingeniero mecánico, a ese primo mío le cortaron el cordón umbilical con un machete, que fue lo primero que encontraron luego de bucear a ciegas y a riesgo por la cocina de la casa."
Palacios cuenta que la familia de aquel vecino de Arturo se ahogó río abajo, como sucedió con alrededor de las mil 200 personas que murieron entonces por la furia del Flora.
Hay que recordar que tal acontecimiento dio lugar al programa de Voluntad hidráulica creado por Fidel.