jueves, 18 de diciembre de 2014

¡Volvieron!




Tengo la alegría de los vecinos de Calle Siete anudando mi garganta, los ojos han dejado caer una lágrima y mis dedos se resisten a describir toda la carga de sentimientos encontrados que amerita la felicidad de la familia cubana.

Yo no lo podía creer, y como yo muchísimas personas; pero,lo cierto es que, este 17 de diciembre será recordado por el mundo como día histórico, porque marca un antes y un después del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos.

Hoy, quise ir al mediodía en la casa para estar tranquila y atenta, no solo a la comparecencia del  Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, el General de Ejército Raúl Castro Ruz, sino a los comentarios de los habitantes de Bayamo, empero, la felicidad que nos devolvió en esta jornada nos embriagaba a todos y había besos, abrazos, aplausos, lágrimas y risas espontáneas.
¿Quién hubiera creído en esta hermosa jornada de libertad puesta al alcance de su suerte, de mis ojos, y lejos de una ausencia que ya no les pertenece?
Sus palabras vigorosas, sustancialmente veraces y con temas de interés  conmovieron a las todos, mientras aseguraba que Ramón Labañino, Gerardo Hernández y Antonio Guerrero, tres de los Cinco Héroes, luchadores contra el terrorismo e injustamente prisioneros en cárceles norteamericanas, durante 16 años, ya están con sus familias.
La repercución mundial ha sido inmensa y tantísimos los mensajes de solidaridad y alegría por esta nueva realidad. 
Fidel dijo ¡Volverán! y Raúl aseguró ¡Volvieron!

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Raúl Castro le habla a Cuba



Compatriotas:

Desde mi elección como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, he reiterado en múltiples ocasiones, nuestra disposición a sostener con el gobierno de los Estados Unidos un diálogo respetuoso, basado en la igualdad soberana, para tratar los más diversos temas de forma recíproca, sin menoscabo a la independencia nacional y la autodeterminación de nuestro pueblo.

Esta es una posición que fue expresada al Gobierno de Estados Unidos, de forma pública y privada, por el compañero Fidel en diferentes momentos de nuestra larga lucha, con el planteamiento de discutir y resolver las diferencias mediante negociaciones, sin renunciar a uno solo de nuestros principios.

El heroico pueblo cubano ha demostrado, frente a grandes peligros, agresiones, adversidades y sacrificios, que es y será fiel a nuestros ideales de independencia y justicia social. Estrechamente unidos en estos 56 años de Revolución, hemos guardado profunda lealtad a los que cayeron defendiendo esos principios desde el inicio de nuestras  guerras de Independencia en 1868.

Ahora, llevamos adelante, pese a las dificultades, la actualización de nuestro modelo económico para construir un socialismo próspero e sostenible.

Resultado de un diálogo al más alto nivel, que incluyó una conversación telefónica que sostuve ayer con el Presidente Barack Obama, se ha podido avanzar en la solución de algunos temas de interés para ambas naciones.
Como prometió Fidel, en junio del 2001, cuando dijo: ¡Volverán!, arribaron hoy a nuestra Patria, Gerardo, Ramón y Antonio.

La enorme alegría de sus familiares y de todo nuestro pueblo, que se movilizó infatigablemente con ese objetivo, se extiende entre los cientos de comités y grupos de solidaridad; los gobiernos, parlamentos, organizaciones, instituciones y personalidades que durante estos 16 años reclamaron e hicieron denodados esfuerzos por su liberación. A todos ellos expresamos la más profunda gratitud y compromiso.

Esta decisión del Presidente Obama, merece el respeto y reconocimiento de nuestro pueblo.


Quiero agradecer y reconocer el apoyo del Vaticano, y especialmente, del Papa Francisco, al mejoramiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Igualmente, al Gobierno de Canadá por las facilidades creadas para la realización del diálogo de alto nivel entre los dos países.

A su vez, decidimos excarcelar y enviar a Estados Unidos a un espía de origen cubano que estuvo al servicio de esa nación.

Por otra parte, basados en razones humanitarias, hoy también fue devuelto a su país el ciudadano norteamericano Alan Gross.

De manera unilateral, como es nuestra práctica y en estricto apego a nuestro ordenamiento legal, han recibido beneficios penales los reclusos correspondientes, incluida la excarcelación de personas sobre las que el Gobierno de los Estados Unidos había mostrado interés.

Igualmente, hemos acordado el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.

Esto no quiere decir que lo principal se haya resuelto. El bloqueo económico, comercial y financiero que provoca enormes daños humanos y económicos a nuestro país debe cesar.

Aunque las medidas del bloqueo han sido convertidas en Ley, el Presidente de los Estados Unidos puede modificar su aplicación en uso de sus facultades ejecutivas.

Proponemos al Gobierno de los Estados Unidos adoptar medidas mutuas para mejorar el clima bilateral y avanzar hacia la normalización de los vínculos entre nuestros países, basados en los principios del Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas.

Cuba reitera su disposición a sostener cooperación en los organismos multilaterales, como la Organización de Naciones Unidas.

Al reconocer que tenemos profundas diferencias, fundamentalmente en materia de soberanía nacional, democracia, derechos humanos y política exterior, reafirmo nuestra voluntad de dialogar sobre todos esos temas.

Exhorto al Gobierno de los Estados Unidos a remover los obstáculos que impiden o restringen los vínculos entre nuestros pueblos, las familias y los ciudadanos de ambos países, en particular los relativos a los viajes, el correo postal directo y las telecomunicaciones.

Los progresos alcanzados en los intercambios sostenidos demuestran que es posible encontrar solución a muchos problemas.

Como hemos repetido, debemos aprender el arte de convivir, de forma civilizada, con nuestras diferencias.
Sobre estos importantes temas volveremos a hablar más adelante.
Muchas gracias.

jueves, 11 de diciembre de 2014

Loraine, una joven artesana de Bayamo

Dales tiempo a sus manos y ellas harán lo que quieran, dijo mi padre aquella mañana de diciembre, cuando nació Loraine Infante Blanco, la hija mayor de mi hermana Ana, y la vida extendió los brazos que tocaron el hombro de aquel eufórico abuelo, porque con esos órganos del cuerpo humano, la niña, que ya es toda una mujer,  materializa cualquier idea que pase por su mente.
La fama de Loraine  trasciende los límites de Calle Siete, aun cuando solo ha expuesto su obra  en un ambiente de confraternidad e intercambio de experiencias sin carácter competitivo, más bien en el seno familiar, sin pensar  que con su labor artesanal está íntimamente  relacionada con la naturaleza y el medio. Por los objetos de valor práctico-utilitario y ornamentales que crea quién sabe si pronto se le conoce en Cuba toda.
El arte  no tiene definición, eso he escuchado en la casa, y dicen, también, que la mujer es un ser humano con capacidad creativa que innova en cualquier tipo de situación; ya lo he vivido en varias etapas de mi existencia; empero, lo que más me satisface ahora es saber que Lola, como la conocemos sus parientes más cercanos está centrada en alejarse del ocio mediante el tejido como vehículo para promover  cultura; mientras se entretiene y  rescata tradiciones.
Fíjense en los detalles de las blusas de las niñas, o en su sobreblusa; ella tiene talento para el oficio y puede tejer lo que se propone. Aquí le dejo algunas muestras: jicoteas, gallinitas, tapetes, alfombras, bolsos, carteritas y lo que quiera, porque sus manos crean lo que está en su corazón.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Lisandra, Ivette y la Medicina Latinoamericana en Bayamo

Con la celebración en Cuba de la Medicina Latinoamericana mi familia se puso feliz porque a la casa llegó Lisandra, la hija menor de mi hermana Ana Luisa, la joven festeja por primera vez la fecha, ya como profesional de la Salud en la suroriental provincia de Granma.
En realidad mi sobrina presta sus servicios en Tínima, consejo popular de Bueycito, en el montañoso municipio de Buey Arriba, el único de su tipo en la Mayor de las Antillas protagonista de un encuentro que preserva el patrimonio inmaterial de la serranía.
Estoy feliz, lo confieso, también, porque la sede nacional del acto por la efeméride la obtuvo este año el Centro Médico Ambulatorio del Hospital Carlos Manuel de Céspedes, conocido como  Clínica de Especialidades, de Bayamo. 
Y, además, este 3 de Diciembre les fue conferida  la medalla de Trabajador Internacionalista y la Manuel Piti Fajardo, a médicos, enfermeras, técnicos y otros trabajadores del Céspedes.
En Calle Siete, se felicitó en lo particular a la doctora Ivette Ruiz Carbonel, quien tiene su puesto en el sindicato del sector, una  labor casi anónima, pero que muchos agradecen y ella lo desempeña con mucho amor. 
Verdaderamente los médicos cubanos merecen que se les felicite no solo por este día, sino por su trabajo cotidiano,  su prestigio en las comunidades, los consultorios médicos, hospitales, su desvelo  y su altruismo allende los mares.
Yo, extiendo una felicitación especial a los médicos que combaten el ébola en África.  
Fotos Luis Carlos Palacios